En una sociedad como la nuestra, en la que prima el aspecto físico como motor de las relaciones sociales, las patologías que afectan a las partes más visibles del cuerpo han alcanzado un protagonismo que requiere de una consideración integral, porque una afección leve en el ámbito estrictamente clínico puede provocar alteraciones psicológicas graves y hasta decisivas para la realización personal y profesional de los afectados.
Tal es el caso del acné, especialmente en una etapa de la vida en la que las frustraciones y rechazos alcanzan un dramatismo desmesurado, la adolescencia.
¿Cómo controlarlo? Lo mejor es atender las recomendaciones de la Academia Española de Dermatología:
- Lávate la cara dos veces al día, una por la mañana y otra por la noche. Recuerda que los productos de tratamiento deben aplicarse de forma tópica después del lavado, y que la higiene es un fundamental en el tratamiento del acné.
- No fricciones la zona afectada, no te frotes a fondo con la toalla, mejor sécala con cuidado.
- Sigue una dieta equilibrada, ten presente que aunque los alimentos no son la causa del acné, conviene no abusar de:
– Cerdo, grasas, bollería, mariscos y alcohol.
– Alimentos con chocolate o derivados del alcohol.
– Frutos secos (pipas, almendras…).
– Quesos fuertes (roquefort, camembert…). - Evita el contacto del pelo con la piel de la cara, es decir, olvídate del flequillo y de las melenas largas.
- No uses cosméticos cuya composición incluya aceites o grasas: utiliza siempre los “Oil free”, que son los especialmente indicados para pieles grasas.
- Prescinde de los fotoprotectores grasos.
- No toques ni manipules los granos provocados por el acné, sólo así podrás evitar complicaciones y cicatrices.
- Procura no caer en situaciones de estrés. Es difícil, lo sabemos, con la vida tan ajetreada que llevamos pero es recomendable evitar las situaciones anímicas conflictivas que causan nerviosismo y cansancio. Y dormir las ocho horas diarias de rigor.
- Practica deporte, sobre todo al aire libre.
- No compartas tus tratamientos con amigos y conocidos: cada acné es diferente.
- No trates las cicatrices mientras las lesiones estén activas.
- Y, el consejo más difícil de seguir de todos: ten paciencia. El acné es una dolencia que, incluso con tratamientos, no tarda menos de tres meses en curarse. Para el éxito terapéutico contra el acné es indispensable la constancia.